LUIS GARCÍA MONTERO (Granada, 1958)
No
buscaba las olas
cuando
después del beso descubrí en su piel
un
recuerdo salado del mar donde fui niño.
Confirmo
si hace falta que todo lo pensé,
mil
veces he medido las sílabas del tiempo,
pero
también mil veces aprendí que no salen las cuentas,
y
la duna que soy de forma irremediable
con
mi viento descalzo de los juguetes rotos,
mis
historias de amor,
mi
mala vida.
¿Qué
recuerdo de ti?
La
noche inevitable que arde como un rito,
la
norma temeraria de castigar los límites
y
el negro maltratado de tus ojos.
¿Qué
recuerdas de mí?
La
noche inevitable que arde como un rito,
la
norma temeraria de castigar los límites
¿Qué
sabrán de nosotros?
La
noche interminable que ardía como un rito,
la
norma temeraria de castigar los límites
y
el negro maltratado de los ojos.
No
te voy a pedir el corazón que llevas
escondido
debajo de tu ropa de invierno.
Solamente
esperaba, como leña reunida,
para
arder en el fuego que calienta tus manos.
Quiero
entender tu noche, tu sed, tus libramientos,
tu
vivir en las sílabas que componen tu nombre,
tu
quedarte dormida, tu me voy a la cama,
tu
silencio acostado, mi silencio acostado,
las
cosas que me pasan cuando sueñas conmigo.
(Do libro Un invierno propio, editado por Visor. 2011)
Escoitemos a Luis García Montero recitando dous poemas.
O primeiro chámase "Dedicatoria".
E o segundo, dedicado á súa nai, chámase "Madre". Presentación do seu libro "Vista cansada", na Residencia de Estudiantes no ano 2008.