MARÍA ROSA SERDIO (Langreo, 1953)
     
Tomo esta voz,
el susurro de la fuente, el
 crujir de los senderos, la
     
hoja que vive
           y muere.
         Tomo tu voz,
 
tu regalo de sonidos,
la soledad de los grillos
     
que cantan
   
y me conmueven.
     
Esa voz,
la que me acunó de niña,
      
la que me llama
          y 
me mueve.
Hablan y cuentan
 de sus adentros
 
de sus afueras,
 
de las galaxias
 y sus quimeras.
 Hablan y suben
 hasta los astros
en noches largas
   
y días claros.
Hablan y alivian
 
algunas penas
 con las palabras
    
y los poemas.
Siempre nos dicen
 
que nos esperan
 
entre los cantos
 
de las sirenas
y entre los libros
      
sueñan.
LUNA LLENA DE FEBRERO
          Al final,
     
se va febrero…
¡Y el ciprés ya pajarea!
  
La orilla del río bulle
            de prímulas
            y sorpresas.
         Toda el agua baja
                 y sonríe
               satisfecha.
         Limpio el corazón
                 y el aire…
   
¡Se anuncia la primavera!
        Un caminante se para
                   y la luna
                        está
                   perfecta.
CANCIÓN DE OTOÑO
Nubarrones, nubes bellas,
  
cielos altos de algodón.
   
por sillega la ocasión.
Vientecillo, viento suave,
 
dulce sur de mi ilusión.
  
Ya tengo listo mi peine
por si cantas tu canción.
Otoño, estación dorada,
 
paso en hojas de color.
Ya tengo a mano mi cesto
   
para recoger tu don.
(Do libro De barquillos y cometas,
editado por Pintar - Pintar, 2023 e ilustrado por Ester Sánchez)
                 
 







 
