Levaba
algún tempo o meu querido amigo Juan
Carlos Martín Ramos sen escribir para Versos e aloumiños.
E
faino, desta volta, pola porta grande. A culpa? Pois Rafael
Alberti, María Teresa León, unha fermosa curtametraxe, a voz do matrimonio,
a fermosísima creación de dous cineastas, o documentalista italiano Enrico
Gras e o produtor uruguaio Danilo
Trelles.
Non
vou repetir as palabras do poeta cordobés: para iso está o seu magnífico
artigo. Pero chamoume unha noite á casa e comentoume o achádego. Fiquei
sorprendido. Non tiña coñecemento dela.Enviouma e gozamos del. As imaxes
poderosas, a poesía de Alberti e a súa voz, as aparicións sonoras de María
Teresa cativáronos.
Hoxe
está todo neste blog-revista para desfrute daquelas persoas que o desexen.
Animádevos.
Paga moito a pena.
“PUPILA
AL VIENTO”
(un
cortometraje que muy poca gente ha visto)
CON
RAFAEL ALBERTI Y MARÍA TERESA LEÓN
Juan Carlos Martín Ramos
No
estoy muy seguro de si en estos tiempos se puede hablar de Rafael Alberti sin riesgo de que te lleven a los tribunales. Lo que
sí sé es que cada vez es más difícil encontrar sus obras fuera de los circuitos
de libros de segunda mano y de ocasión.
Pido
clemencia de antemano por si incumplo alguna ley, escrita o imaginaria, o si invado
la intimidad de los derechos de alguien. Sólo quiero hablar de un poeta. Un
poeta que también considero mío desde que leí por primera vez sus poemas a los
quince años.
Quiero
hablar de Rafael Alberti, pero lo haré después. Antes quiero hablar de María Teresa León. Su esposa, su
compañera de exilio. Una mujer que encarnó los ideales de una época, que abrió
camino al feminismo, que rompió esquemas y estereotipos. Una escritora que
merece ser rescatada de la inmensa sombra de su querido poeta.
Hace
unos días empecé a leer su biografía, “Palabras contra el olvido. Vida y obra de
María Teresa León (1903-1989)”, de José
Luis Ferris, premio Antonio Domínguez Ortiz de Biografías 2017, publicada
por la Fundación José Manuel Lara. Lectura
que recomiendo, igual que recomiendo más aún la lectura de su hermoso libro “Memoria
de la melancolía”, hasta hace poco casi inencontrable y, por fortuna, recientemente
publicado por la editorial Renacimiento.
Estaba
en la página 302 de su biografía, adentrándome en un capítulo en el que se
habla de La Gallarda, la casa de Punta del Este en la que la familia Alberti
pasaba los veranos, cuando de pronto leí que, en 1949, el director y
documentalista italiano Enrico Gras
y el productor uruguayo Danilo Trelles
“invitaron a la pareja de escritores a intervenir en un nuevo proyecto
cinematográfico”. Se trataba “de un cortometraje titulado ´Pupila al viento
(Diario del Faro de Punta del Este, 1883)´, primer film de arte experimental
rodado en Uruguay. Rafael Alberti fue el encargado de escribir esta vez el guion,
´Palabras sincrónicas para un film de Enrico Gras sobre Punta del Este´, y de
realizar con María Teresa, la locución del texto poético que recorre los algo
más de 14 minutos que dura la proyección”.
Un
hecho así, del que no recordaba ninguna noticia, despertó inmediatamente mi
curiosidad. Así que cerré el libro, me aventuré en el navegador de internet a
ver si encontraba algún rastro del mencionado cortometraje y, ¡oh, sorpresa!,
ahí estaba: “Pupila al viento” (1949), de Enrico Gras y Danilo Telles.
Enorme
emoción. Ahí estaba el cortometraje y ahí estaba la voz de Rafael Alberti, y en
algunos momentos también la voz de María Teresa León, recitando las “palabras
rítmicas” (como se dice en los créditos) escritas por Alberti, acompañadas por
la música del compositor español Julián
Bautista.
El
cortometraje es una producción de la Comisión Nacional de Turismo de Uruguay,
que, según cuenta José Luis Ferris, “no sólo sirvió de excelente promoción
turística de la zona, sino que tuvo una gran repercusión en los ambientes
culturales y un importante reconocimiento en la prensa tras su estreno”.
He
podido confirmar, leyendo lo que he encontrado en mi búsqueda internáutica, que
“Pupila al viento” estuvo perdida durante décadas hasta que se encontró un
negativo en la Cinemateca de Praga y que está considerada como la obra maestra
del cine experimental uruguayo.
No
sé cómo podríamos clasificarlo: ¿un documental poético?, ¿un poema
cinematográfico?, ¿un cinepoema? Da igual el nombre. A pesar del enorme logo de
la Cinemateca Uruguaya, que se come media pantalla, vais a poder comprobar que
se trata de un cortometraje singular, sugerente, emocionante, poético, lleno de
imágenes oníricas, de luces y sombras surrealistas.
Alberti,
en realidad, no es el autor del guion, escribió un poema sobre la imagen terminada.
Según dijo en una ocasión, “las palabras coinciden rigurosamente con la imagen,
silábicamente con la imagen; palabras sincronizadas, como se sincroniza
una canción. Está hecho en la moviola,
mirando cada cosa, coincidiendo con lo que pasa”.
Pero
Alberti se quedó corto en lo que dijo. Un poeta como él no podía limitarse a
describir las imágenes. El hilo de sus palabras las transforma, intensifica el
hechizo sobre el espectador con la magia, la gracia y la fuerza de su poesía.
Años
después, Rafael Alberti incluyó el texto que escribió para este cortometraje
dentro de su libro “Poemas de Punta del Este”, publicado en 1961. Invito
también desde aquí a leer o releer este libro, como cualquier otro de los
suyos.
Y
añado una curiosidad. “Pupila al viento” es el título de un libro de poemas que
en 1998 publicó la hija de Rafael y María Teresa, Aitana Alberti.
Juan Carlos Martín Ramos |
Pónganse
cómodos en sus butacas. Apaguen las luces y dejen que “Pupila al viento” ilumine
la pantalla. Suban y bajen por la escalera de caracol de este faro que aún
puede alumbrar y deslumbrarnos desde mediados del siglo pasado en Punta del
Este.