BEATRIZ BERROCAL
(Benavente. Zamora, 1962)
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| Beatriz Berrocal |
Se
han cansado las perdices
se
los cuentos infantiles,
pues
acaban todos ellos
con
finales tan felices
que
la gente lo celebra,
desde
el niño hasta la abuela,
echando
unas cuantas de ellas
a
guisar en la cazuela.
Para
que esto se termine
han
decidido actuar
cambiando
las aventuras
y
que acaben siempre mal.
No
habrá más celebraciones,
pues
nadie estará contento.
Se
salvarán las perdices, pero…
¿Qué
pasará con los cuentos?
7
Siete
enanitos salen del trabajo
y
van andando por el monte abajo.
Van
hacia su casa contentos, cantando
porque
Blancanieves los está esperando.
Pero
una mujer que va disfrazada
le
da una manzana que está envenenada.
Cae
de pronto al suelo muy asustada
y
los enanitos la encuentran desmayada.
Este
maleficio solo puede irse
si
un apuesto joven viene a despedirse.
Entonces
las perdices cambian el letrero,
el
príncipe a caballo no encuentra el sendero.
No
le da ese beso que la iba a salvar,
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| Ilustración de Raquel Saiz |
se
va cabalgando hacia otro lugar.
Los
siete enanitos no saben qué pasa.
Dos
perdices ríen de camino a casa.
Otra
vieja historia se queda sin fiesta
y
les da lo mismo si alguien protesta.
9
Los
niños que leen los cuentos
se
están quedando asustados:
las
historias que sabían
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| Ilustración de Raquel Saiz |
ahora
las han cambiado.
¿Qué
puede haber ocurrido
con
todos los personajes?
¿Será
obra de una bruja
que
les ha dado un brebaje?
¿O
será un encantamiento
obra
de un hada malvada?
El
caso es que los lectores
no
entienden nada de nada.
(Del
libro La revolución de las perdices. XIII Premio de Poesía Luna de aire. Ed.SM. 2016. Certamen convocado por el
CPLI. Universidad de Castilla-La Mancha)
