GILDA GUIMERAS
PAREJA (La Habana, 1957)
PUDIERA
Con
la punta del lápiz
puedo
nacer las calles abiertas a la costa
transitar
la calzada
repetir
las aceras,
Gilda Guimeras Pareja |
elegir
una forma de volver a la esquina
agraciada
de viento,
devorar
escalones y trasponer la puerta
hasta
donde el café
la
ventana, los gritos
tres
metros más arriba
y seis y nueve metros.
Pudiera
nuevamente descubrir que mi casa
sus
butacas, el sitio
que
he convertido en isla
es una pieza en medio
de tanta vida ajena.
NECESIDAD
La
terca vocación
de
andar bajo otras pieles
de
horadar otros mundos.
Esa
necesidad
y
el sonido del mar
me
asedian todavía.
CAFÉ PARÍS
La
voz del saxofón en esa isla de luz,
dejada
atrás la calle
donde
el bésame mucho
una
cafetería de sones digitales
la
cola del helado.
El
guayo serpentea
entre
las pocas mesas de rubios y mulatos,
el
bajo marca el ritmo
y
las notas del blues se escurren en la noche:
vuelan
de contrabando
por
la ciudad a oscuras.
Entrega de los Premios Tiflis de Poesía, Novela y Cuento. 2015 |
QUISIERA
Que
la noche amanezca
una
tromba de luz
despertar
de pupilas
inválidas
de sueños,
clonar
de corazones,
festival
de palomas
para
el momento exacto
que
declaremos doce
y
contemos de nuevo
no
ochenta mil segundos
de
otro día cualquiera,
sino
todos los puentes
las
voces, estaciones
el
infinito tiempo.
(Del
libro Quien llega a los andenes,
publicado por Visor Libros, 2016. XXIX Premio
Tiflos de Poesía).